Muerte súbita tras ponerle a uno las esposas.

Ser arrestado por la policía puede ser mortal.

Médicos españoles han informado que un pequeño porcentaje de personas puede padecer muerte súbita tras ser detenidos, según un estudio realizado en España, dirigido por el Dr. Manuel Sellés, cardiólogo del Hospital Gregorio Marañón de Madrid y presentado hoy día 03.09.08 en el Congreso Europeo de Cardiología que se celebra de Munich (Alemania).

"El número de pacientes es suficiente cómo para mostarnos que pasa algo inusual" comentó el Dr. Sellés. Junto a otros colaboradores, descubrieron que en la última década se habían producido 60 fallecimientos de personas detenidas, en las primeras 24 horas después de su detención. En todos los casos se trató de varones, con una edad media de 33 años. De ellos, 12 eran drogadictos, cuatro estaban en tratamiento por enfermedades psiquiátricas y otros cuatro recibían tratamiento por otras patologías. Aprox. 20 de estos arrestados murieron justo después de ser esposados.

En ninguno de estos casos se pudo constatar uso de la violencia por parte de la policía. La autopsia se le efectuó a todos estos fallecidos y en ninguno de ellos se pudo encontrar una causa orgánica o funcional que explicara el deceso.

La hipótesis del Dr. Sallés se centra en que el arresto implica un alto grado de estrés, que aumenta la presión sanguínea y la frecuencia cardíaca. También se produce una descarga notable de adrenalina que a su vez produce vasoconstricción que, en casos extremos, puede conducir a una muerte súbita.

"Es razonable pensar que bajo una situación extrema de estrés, esto pueda llegar a ocurrir" dijo el Dr. Jonathan Halperin del Hospital Mount Sinai en Nueva York y portavoz de la Sociedad Americana de Cardiología.

Hay otras situaciones extremas de estrés como terremotos y tsunamis que pueden provocar muerte súbita, al igual que una enfermedad rara llamada Cardiomiopatía por estrés de Tako-Tsubo. Ocurre, esta última, sobre todo en mujeres que han pasado un trauma psíquico severo, como la muerte de un ser querido o un desengaño amoroso.

Via: brisbanetimes.com.au

Por tanto, ante un arresto, tómeselo con calma, relájese y disfrute de la experiencia.