INGREDIENTES (para 4 personas):- 4 filetes de hígado.
- 1 kilo de cebollas.
- Harina.
- 8 cucharadas de aceite de oliva virgen.
- Pimienta.
- Sal.
Cortamos la cebolla en rodajas finas. Cubrimos de aceite el fondo de una sartén, agregamos la cebolla, sazonamos y rehogamos a fuego muy suave hasta que esté tierna. Pasamos la mitad de la cebolla a una cacerola de barro. Sazonamos con sal y pimienta los filetes de hígado, enharinamos y freímos en una sartén con muy poco aceite. Pasamos los filetes de hígado a la cazuela de barro y cubrimos con la otra mitad de la cebolla, calentamos y antes de que empiece a hervir, retiramos del fuego. Servimos los filetes de hígado con la cebolla sofrita según sacamos de la cazuela.
El hígado es una víscera rica en diferentes vitaminas y minerales, sin embargo su contenido en colesterol es bastante elevado por lo que conviene no abusar de su consumo. En este caso el hígado se acompaña de un alimento cuyo sabor combina a la perfección con el del hígado como es el caso de la cebolla. Ésta aporta un toque de color muy agradable al plato además de diferentes vitaminas, minerales y sustancias con acción antioxidante grandes aliadas de nuestra salud.
De postre un té a la menta y una pastita.
Yo hago el mejor té a la menta de todos los tiempos y no sé todavía por qué no figuro, por tanto, en el libro de los Guiness - Records. Utilizo té verde que no sea de grano demasiado fino. Pongo una cucharita rasa de té por persona y una extra (para la tetera). Cuando el agua está hirviendo se vierte sobre la tetera una mínima cantidad de agua, lo suficiente para que el té se remoje y se pierda el polvillo. Después de un minuto, se tira este agua. Se llena la tetera y no se agita apenas durante unos tres minutos. Después se le añade el azúcar (bastante), (los diabéticos le pondrán sacarina, pero lo siento, chicos, no sabe igual) y se remueve. En los vasos se pondrá bastante cantidad de yerbabuena que previamente se ha mojado bajo el chorro del agua, sin tocarla, y después se escurre con leves golpes en el aire ("como un latiguillo"). Una vez servido un té lo pruebo para ver si está bien de azúcar. En el caso de que le falte, se echa este té de nuevo en al tetera y se endulza a voluntad. El té se sirve elevando poco a poco la tetera, mientras se sirve. Al llegar a llenar el vaso, se gira bruscamente la tetera para interrumpir el chorrito. Hay que procurar tener buena mano para que, aunque esté bastante separada la tetera del vaso, no caiga el té fuera. Se le añade al té algunas gotitas de agua de azahar.
Se acompaña de alguna pastita. Durante el té se puede contar alguna historia interesante y decirle a la novia lo guapa que está. Esto garantiza un buen Karma, muy provechoso para el espíritu y el body. Que os aproveche.
Disimil-lah!