Asso se ha preguntado "por qué hay tan pocos pacientes cardiópatas remitidos a rehabilitación", que no es otra cosa que el ejercicio supervisado. Cree -además- que el ejercicio físico es "la manera más barata y eficaz" de evitar los riesgos cardiovasculares. "El ejercicio mejora la función del endotelio en todos los vasos".
Con un desfibrilador automático implantado o después de sufrir una angina de pecho, "caminar activamente es muy beneficioso para el paciente. Es, por tanto, la rehabilitación en este campo una asignatura pendiente en España".
Limitar las calorías
Además de hacer ejercicio, ayunar durante algunas horas o limitar el aporte calórico en la dieta son prácticas también muy beneficiosas para quienes padecen trastornos cardiovasculares. Y no sólo para ellos. Según Asso, el ayuno evita éstas y otras dolencias porque favorece la regeneración de las células.
Fruto de recientes investigaciones, existe ya constancia de que privarse, por ejemplo, de una o dos comidas consecutivas produce unas reacciones químicas en las mitocondrias (las baterías de las células que forman los organismos vivos) que reparan las paredes de estas células, favoreciendo su mayor longevidad.
"Hay al menos dos enzimas, sirt 3 y sirt 4, protectoras de la célula, que aumentan cuando hay privación calórica". Otros estudios de investigación básica citados también en el curso celebrado en Zaragoza demuestran una mejora de la sensibilidad de la insulina con el ayuno continuado. Son resultados que vienen a contraponerse a la actual epidemia de obesidad.
Asso ha advertido de que "estas observaciones se encuentran en fases experimentales, pero permiten augurar en el medio y largo plazo la síntesis de sustancias de gran impacto en la prevención y el tratamiento de la ateroesclerosis, que es el primer enemigo de las sociedades occidentales en términos de salud cardiovascular".
Los primeros resultados a este respecto fueron presentados en noviembre pasado en el congreso de la Asociación Americana del Corazón, donde se aludió a estudios en grupos de población que ayunan regularmente, como los adventistas. En ellos se encontraron menos riesgos cardiovasculares.
Asso organiza cada año, desde hace ocho, este curso, que pone en contacto a especialistas y médicos de primaria. Según su promotor, "trata de ir al inicio del problema cardiaco, que es el clínico. Es la clave del éxito en cardiología", especialidad que parte de la observación y que necesita de un diagnóstico precoz.
Cambia la historia natural
Otras líneas de investigación abiertas en cardiología se centran en el desarrollo de la alternancia de la onda T, como método diagnóstico no invasivo útil para estratificar los riesgos. Antonio Asso, especialista en electrofisiología cardiaca, cree que esto es de vital importancia para tratar la muerte súbita "sin sobretratar".
Existen también ensayos ampliamente difundidos con células madre, de regeneración celular, y estudios tecnológicos "para facilitar técnicas que aún son complejas en el intervencionismo coronario". Y si todo eso no funciona, "está la resincronización cardiaca con desfibrilador implantable", ha añadido Asso. "El caso es que con los avances tecnológicos estamos cambiando la historia natural de las enfermedades".