El uso de un podómetro está asociado con el aumento de la actividad física diaria


Madrid (23-11-2007).- Una revisión de estudios previos realizado por la Universidad de Stanford en California (Estados Unidos) indica que el uso de un podómetro, en concreto con un objetivo diario, está asociado con aumentos significativos en la actividad física, un aumento adicional de 1,61 kilómetros al caminar, y un descenso en el índice de masa corporal (IMC) y la presión sanguínea. Las conclusiones de la investigación se publican en la revista Journal of the American Medical Association (JAMA).

Los investigadores evaluaron la asociación entre el uso de un podómetro y la actividad física y los progresos en la salud entre los adultos. Los autores examinaron bases de datos en busca de estudios y artículos sobre este tema e identificaron 26 estudios con un total de participantes que reunían los criterios de inclusión. Los participantes tenían una media de edad de 49 años y el 85 por ciento eran mujeres. La media de duración de la intervención era de 18 semanas. En los ocho ensayos controlados aleatorizados incluidos aumentaba de forma significativa la actividad física de los participantes una media de 2.491 pasos al día en comparación con los sujetos control.

En el caso de los estudios observacionales, aquellos que utilizaban podómetros aumentaban su actividad física en unos 2.183 pasos al día en relación a la línea base (2.000 pasos es aproximadamente 1,61 kilómetros).
De forma global, los participantes que utilizaron podómetro aumentaron su actividad física en un 26,9 por ciento en relación a la línea base de la que partieron.

Entre las características de la intervención, tener un objetivo de pasos fijado constituía un factor clave para aumentar la actividad física. Los tres estudios que no incluían este objetivo de pasos no mostraron una mejora significativa en la actividad física con el uso del podómetro en contraste con el aumento de más de 2.000 pasos diarios conseguido tras fijar un objetivo por ejemplo de 10.000 pasos al día.


Los participantes disminuyeron su índice de masa corporal en 0,38 puntos según la línea base de partida, una reducción que se asoció con una edad más avanzada y un objetivo de pasos. Los participantes también disminuyeron su presión sanguínea sistólica en aproximadamente 3,8 mm Hg, lo que se asoció con una mejora en relación a la línea base y a cambios en el número de pasos al día.


Según los autores, los resultados sugieren que el uso de estos pequeños y económicos dispositivos está asociado con aumentos significativos en la actividad física y mejoras en algunos aspectos de la salud, al menos a corto plazo ya que se desconocen aún tales efectos a largo plazo.