La obesidad acelera el desgaste articular


Losteoartrosis, entendida como desgaste articular, es un problema que viene con la edad, pero existen factores que pueden acelerar el proceso, y el más importante es la obesidad.  


La obesidad contribuye hasta en 80% en la manifestación temprana de la osteoartrosis.  

El alto índice de obesidad, presente inclusive en niños, hace que hasta ellos tengan manifestaciones de daño articular durante su etapa de infancia, atribuibles en 40%, al peso excesivo.  

La osteoartrosis es un proceso degenerativo de las estructuras que conforman las articulaciones, donde el cartílago empieza a desprenderse y provoca así que los huesos contacten entre ellos de manera directa, sin nada que amortigüe, lo cual produce chasquidos, pero sobre todo dolor, que puede ir de leve a intenso.

Al ser las rodillas las articulaciones de mayor carga, es donde las manifestaciones de la osteoartrosis se hacen más evidentes y de acuerdo con el grado de severidad que alcancen, pueden imposibilitar a la persona para sostenerse en pie y caminar.  

Además de las rodillas, otras articulaciones que suelen afectarse por osteoartrosis, incluyen cadera y tobillos, pero el daño en ocasiones llega a ser tal que ni aún con la pérdida de peso del paciente, logra el funcionamiento adecuado de la articulación afectada.  

Los pacientes deben tomar analgésicos y antiinflamatorios, y cuando esto no es suficiente, se recurre a procesos quirúrgicos como son osteotomías -cambios de alineación de los huesos-, o en su momento a prótesis articulares. 


Evitar el sobrepeso y la obesidad, y realizar actividad física supervisada que fortalezca los músculos de sostén para las articulaciones, son medidas preventivas efectivas que deben ponerse en práctica. Cuando un paciente tiene artrosis de rodilla, padece de dolor al andar y la falta de movimiento hace que el gasto de energía sea menor lo que aumenta el peso y éste a su vez empeora la artrosis.