Placebo, mejor cuanto más caro


El precio del medicamento también actúa como placebo, según sugiere un estudio del Instituto de Tecnología de Massachusetts (Estados Unidos) que se publica en "JAMA".
Los investigadores utilizaron un protocolo estándar para la aplicación de descargas eléctricas suaves en la muñeca de los participantes con el fin de medir la tasa subjetiva de dolor. Los 82 participantes del estudio fueron evaluados antes y después de que se les administrara un placebo.
A la mitad de los participantes se les proporcionó un folleto en el que se describía la píldora como un recién aprobado analgésico que costaba 2,5 dólares y a la otra mitad otro folleto que lo describía como un producto que costaba 10 céntimos, sin que se explicaran los motivos.
En el grupo del precio del medicamento más elevado, el 85% de los sujetos experimentaron una reducción del dolor después de tomar el placebo. En el grupo de bajo precio, el 61% de los participantes declaró sentir menos dolor. El hallazgo, a partir de un experimento relativamente simple y pequeño, plantea un buen número de cuestiones, señala el Dr. Dan Ariely, principal autor del estudio.
A juicio de este investigador, "los especialistas quieren creer que es el medicamento y no el entusiasmo sobre un fármaco en particular lo que hace que sea más eficaz terapéuticamente, pero ahora tenemos que preocuparnos sobre los matices de la interacción entre pacientes y médicos".
Según el investigador, los resultados se corresponden con datos existentes que se refieren a cómo perciben las personas la calidad y cómo anticipan los efectos terapéuticos. Pero lo que resulta más interesante, según el Dr. Ariely, es la combinación de la expectación del consumidor sensible al precio con el efecto placebo que provoca creer que un medicamento funciona. "El efecto placebo es una de las fuerzas más fascinantes y menos aprovechadas del universo", apunta.