Lo último para la hipertensión arterial maligna: simpatectomía renal percutánea

¿Cómo se puede tratar con éxito la hipertensión arterial resistente?

En un número nada despreciable de pacientes la hipertensión arterial no puede ser bien controlada ni con tres o más fármacos. En la actualidad disponemos de una nueva opción terapéutica para estos casos: la simpatectomía renal intervencionista.

El concepto fisiopatológico que establece que la presión arterial es fruto de la hiperactividad del sistema nervioso simpático no es nuevo.

Desde los años 50 se practica la simpatectomía quirúrgica como ultima ratio en la hipertensión maligna (resistente al tratamiento convencional). Por lo agresivo de la operación, no es en absoluto sorprendente que esta forma de tratamiento no haya llegado nunca a imponerse como una verdadera alternativa.

Gracias a una tecnología moderna vía catéter existe ahora la posibilidad de que este enfoque de la terapia a largo plazo. Se trata de una forma modificada y mucho menos agresiva del tratamiento de la hipertensión arterial. El objetivo del tratamiento lo constituyen las fibras nerviosas del sistema nervioso simpático que envuelven las arterias renales y que penetran en la adventicia.

Sabemos que las fibras nerviosas renales determinan en gran medida la actividad general del sistema nervioso simpático y la denervación renal del sistema simpático es un nuevo procedimiento efectivo para el tratamiento de la hipertensión resistente o maligna.

Este nuevo método de denervación bilateral de las arteria renales se lleva a cabo por ablación por radiofrecuencia y se efectúa a través de un catéter endovascular. El procedimiento que no es complicado en su realización, dura de 40 a 60 minutos. Los pacientes reciben solamente una anestesia local y un analgésico.

Un estudio aleatorio llevado a cabo por el equipo del Dr. Michael Böhm en Homburg/Saar (Alemania) y publicado recientemente, han mostrado los resultados positivos de esta técnica y su efectividad en el tratamiento de la hipertensión maligna.

El Dr. Mahfoud, colaborador de este equipo, relató en el congreso de Mannheim de la Sociedad alemana de Cardiología, que los paciente seleccionados para este estudio tomaban una media de cinco a seis fármacos diferentes para la hipertensión arterial y a pesar de ello todavía presentaban valores de presión arterial elevados.

En comparación con el grupo de control, en el que de media no hubo cambios significativos, en el grupo de simpatectomía renal selectiva, a los seis meses de realizado el tratamiento se pudo constatar una reducción significativa de la presión arterial, con un promedio de 33/10 mmHg.

Tanto en las mediciones de la presión arterial en el domicilio como su control ambulatorio de 24 horas, se pudo poner de manifiesto una reducción significativa de la presión arterial. Después de la ablación el 84% de los pacientes tuvieron una reducción en su presión arterial sistólica de al menos 10 mm Hg En el grupo control sólo se produjo una reducción de la presión arterial en el 34% de los pacientes.

La denervación simpática renal también tuvo un efecto favorable sobre el metabolismo de la glucosa, informó el Dr. Mahfoud. Se observó una reducción significativa de la glucemia ( en ayunas, de promedio 118mg/dl, se pasó a 108 mg/dl) por una mejora de la sensibilidad a la insulina.

Via: Aerztezeitung.de