Sexo y corazón



Por distintas razones ha existido un mito, una actitud nada científica, respecto al papel de las prácticas sexuales en su relación con la enfermedad coronaria. El miedo a que fuera peligroso, la "vergüenza" a la hora de consultar las dudas con el especialista, el temor "a no quedar bien" con la pareja… han sido algunas de ellas.
Es el momento de acabar con las dudas y el desconocimiento. Sin olvidar, por supuesto, que las aclaraciones de cada caso deben hacerse de forma individual por un especialista que conoce cuál es la situación exacta del paciente. De todas formas, estas serían algunas de las respuestas a las dudas más habituales:
  • El miedo a la realización del acto sexual, tras un episodio de angina de pecho o infarto agudo de miocardio, es muy frecuente. Tanto en el enfermo como en su pareja. Sin embargo, la posibilidad de muerte durante el coito es sumamente baja. Un estudio realizado en Japón sobre 5.559 casos de muerte súbita no traumática estableció que de ellos sólo 34 eran de origen cardiológico y sucedieron durante la actividad sexual; con la particularidad de que 27 de esas muertes se produjeron en relaciones sexuales con una pareja distinta a la habitual. En esos casos, se cree que pueden influir factores como el sentimiento de culpa, el deseo "de quedar bien" y la más que probable existencia de comida y bebidas alcohólicas previas.
  • Se establece que la práctica sexual equivale, en esfuerzo físico, a subir dos pisos de escaleras. Por tanto, los pacientes que hayan sufrido un infarto agudo de miocardio pero hayan tenido un resultado adecuado en la prueba de esfuerzo (en la que se determina el máximo de esfuerzo que pueden encarar su corazón) pueden reanudar su actividad sexual con su pareja habitual tras la segunda semana posterior al infarto. Pero siempre se aconseja que consulte con su médico.
  • Las personas que han sufrido una cirugía coronaria, pueden sentir fatiga ante esfuerzos mínimos debido a la habitual anemia postquirúrgica. El esternón, además, tarda unas seis semanas en consolidar, con lo que ese puede ser el periodo necesario para recuperarse y reiniciar su vida sexual.
  • En general, el lugar más adecuado para mantener de nuevo relaciones sexuales es la habitación habitual evitando que hay temperaturas extremas de frío y calor; es preferible que el momento elegido sea cuando el paciente está relajado y descansado, con lo que al despertar o tras una pequeña siesta serían buenas opciones. Hay que evitar que se produzcan tras una comida especialmente copiosa o si se ha realizado un ejercicio intenso. Respecto a la postura, la recomendación inicial es no adoptar aquellas que requiere una tensión muscular o un esfuerzo físico importante.
  • Si tiene que cumplir alguna medicación como los parches de nitroglicerina, no se los retire durante la práctica sexual. Puede colocarlos en zonas del cuerpo donde no molesten (brazos, abdomen…).
  • Si nota cualquier síntoma extraño (mareo, palpitaciones irregulares, ahogo) durante sus relaciones sexuales, interrúmpalas y coméntelo con su médico. Si aparece dolor en el pecho similar al que precedió a su episodio cardiovascular, suspenda la actividad y tome la cafinitrina que le hayan prescrito.
  • Puede ocurrir que alguno de los fármacos que le hayan prescrito para su enfermedad o alguno de los factores de riesgo que la provocaron (hipertensión, colesterol…) incida en su respuesta sexual. No deje de tomar su medicación. Hable con el médico y él le ayudará a resolver el problema. No olvide, además, que en algunos casos los problemas de disfunción eréctil pueden tener origen psicológico, con lo que hay que discernir correctamente su origen (edad, enfermedad cardiovascular, estado psicológico, medicación, forma física, otras dolencias…).
  • Si tras el episodio cardiovascular tiene que tomar medicamentos que continen nitratos o dadores de óxido nítrico o tiene una grave afección cardiaca NO debe tomar medicamentos potenciadores de la erección. En cualquier caso, consulte siempre con su médico si en su situación de salud es posible tomarlos.