Sanidad Balear: en septiembre y sin dinero para medicamentos.


Las peores previsiones se han cumplido y el Servicio balear de Salud (Ib-salut) ya se ha quedado sin dinero para pagar los medicamentos con receta. Los farmacéuticos han pedido un crédito bancario para poder seguir dispensándolos con su respectivo descuento pero si no lo consiguen avisan de medidas drásticas: «Tendremos que empezar a cobrarlos».

El Govern dio la mala noticia hace diez días al Colegio de Farmacéuticos de Baleares: "No podremos pagaros la factura de los medicamentos hasta enero de 2011". A la Conselleria de Salud le faltan 40 millones de euros para afrontar este gasto así que el Colegio está en negociaciones con varias entidades bancarias –entre ellas Banesto– para que les den un crédito por esa cantidad.

El Ib-salut ha cargado así la responsabilidad de la gratuidad de los medicamentos que se recetan en la sanidad pública sobre las 400 oficinas de farmacia que hay en Baleares. A cambio les ha ofrecido que le retiren el descuento del 13% que cada año le hacen al Ib-salut en la compra de pañales.

La cantidad que ganarán los farmacéuticos con ello rondará los 50.000 euros entre todos. El director general del Ib-salut, Pep Pomar, dice que con ese dinero tratarán de "paliar los efectos financieros que sufrirán los farmacéuticos por los intereses del crédito que han pedido". Además, el Govern ha ofrecido toda la colaboración para avalar la petición de crédito y mediar si hace falta para que se lo concedan.

Lo que ocurre normalmente es que los farmacéuticos pagan siempre por adelantado los medicamentos con receta y a final de mes el Ib-salut les paga. Esa factura varía dependiendo de la farmacia pero oscila entre los 10.000 y los 50.000 euros por cada oficina.

EL MUNDO|El Día de Baleares ya adelantó el pasado 22 de julio que el Ib-salut no tendría dinero para pagar el último trimestre del año esta factura. Pomar se reunió con el presidente del Colegio de Farmacéuticos, Antoni Real, y le dijo claramente que si la Conselleria de Hacienda no le daba más dinero no podría pagar a las farmacias.

Un rescate a medias

El conseller de Economía y Hacienda, Carles Manera, recogió el guante y se puso a trabajar para aumentar el deteriorado presupuesto de la Conselleria de Salud. Al final, según reconoció ayer el gerente del IB-salut a este periódico, "en los próximos días" recibirá un 5% más del presupuesto: 58 millones extra. Sin embargo, este dinero no se podrá destinar a pagar los medicamentos porque el Ib-salut tiene otros compromisos que cree más urgentes: las nóminas del personal y el gasto corriente de hospitales y centros de salud.

Ese dinero que ha aprobado Manera salvará las nóminas de los más de 14.000 trabajadores de la sanidad pública y el correcto funcionamiento de los centros sanitarios de la comunidad.

En conclusión: Pomar se ha quedado sin dinero y el damnificado ha sido el sector de las farmacias. El presidente del Colegio de Farmacéuticos se siente "profundamente defraudado". Avisa que esta decisión "va a repercutir" en el empleo del sector y que ya se está viendo en el número de inscritos en la bolsa de trabajo de la entidad colegial.

No es la primera vez que el Ib-salut deja sin pagar algo a los farmacéuticos. El año pasado ocurrió lo mismo pero a menor escala. En diciembre se acabó el dinero y el sector se quedó sin cobrar 8,5 millones de euros. El suceso no fue muy grave porque el nuevo año estaba próximo y con él la nueva partida presupuestaria, así que la deuda se saldó en menos de un mes. En aquella ocasión, el Colegio consiguió un crédito bancario con sus correspondientes intereses: 9.000 euros. A día de hoy el Ib-salut todavía no le ha pagado esa cantidad al Colegio. También tiene deudas pendientes con él por la alta inversión que han realizado las farmacias en la instalación de la receta electrónica.

A todo esto hay que añadir la política que está realizando el Gobierno central para rebajar el gasto farmacéutico y que está perjudicando al sector. Se ha impuesto por decreto una rebaja en el precio de miles de medicamentos y en los centros sanitarios se están recetando más que nunca marcas genéricas, que son más baratas. El Colegio ha cuantificado las consecuencias y ha avisado que a nivel nacional habrá alrededor de 5.000 despidos y en Baleares unos 400. Según los últimos datos del Ministerio de Sanidad, el gasto farmacéutico bajó en agosto en Baleares un 6,4% respecto al mismo mes de 2009. Los ciudadanos se gastaron en las farmacias un total de 17 millones de euros. El gasto medio por receta también bajó en las Islas y de manera más alta que en el resto de comunidades. Fue de 11,7 euros, un 18% menos que en agosto de 2009.

Presupuestos "realistas"

La causa principal de todos estos problemas es la crisis económica y el duro recorte en el presupuesto de la Conselleria de Salud en el presente año. La sanidad pública balear fue la que sufrió mayor descenso de todas las comunidades: un 7% (casi 100 millones). Cuando se conoció el recorte hace casi un año todos los sindicatos pusieron el grito en el cielo y avisaron de cómo menguaría la calidad asistencial. CCOO se encerró en las instalaciones del Ib-salut y dos de sus dirigentes de la federación de sanidad iniciaron una huelga de hambre para hacer reaccionar a Manera.

El año ha estado marcado por un aumento de la deuda del Ib-salut y una dura austeridad que ha afectado a las sustituciones del personal. El Colegio de Farmacéuticos ha pedido por carta al Govern que los presupuestos del año que viene sean más "realistas".

Via: elmundo.es