- 4 filetes grandes de mero.
- 1 limón.
- 1 zanahoria.
- 1 puerro.
- 1 pimiento verde.
- 1 calabacín.
- 1 pimiento morrón rojo.
- 8 cucharadas de aceite de oliva.
- Sal.
Calentamos una sartén antiadherente, la aceitamos ligeramente y colocamos encima las rodajas de mero. Cocinamos el pescado a fuego lento, por ambos lados, y lo rociamos con limón unos minutos antes de terminar la cocción. Servimos con unas verduras salteadas: tiras de puerro, zanahoria, bastoncitos de calabacín y setas troceadas en láminas. Las salteamos todas a la vez en una sartén caliente, con unas cucharadas de aceite de oliva y una pizca de sal, durante cinco minutos al estilo 'wok'.
Preparar recetas ligeras y sabrosas es tan sencillo como elegir el alimento que más guste y acompañarlo de una vistosa guarnición. El mero al ser un pescado blanco con bastante carne y sin apenas grasa, permite cocinarlo a la plancha sin que se desmigue demasiado, por lo que el plato queda más que presentable. La elección de verduras de temporada como guarnición es muy acertada. Y acostumbrarse a comer las verduras cocinadas "al dente", ligeramente crujientes, es una sana costumbre, ya que no pierden valor nutritivo. La guarnición vegetal complementa el plato en lo nutricional (vitaminas y fibra que el pescado no tiene) y lo hacen más apetitoso.
De postre, mandarinas.